La mama de pequeña P estaba en la cocina escuchándolo todo.
Esta castigada por desobediente, pero si me promete que me hará caso le levantare el castigo, confiare en ti y en tus amiguitas.
Todas se pusieron muy contentas.
La mama de pequeña P aviso a las niñas, jugad donde queráis pero no acercaros a las obras sabed que allí hay mucho peligro hay maderas viejas hierros i clavos oxidados, tenéis muchos sitios donde ir y divertiros sin tener que acercaros a las obras que son muy peligrosas.
Las niñas empezaron a jugar.
¿Y DONDE FUERON? ¡ A LAS OBRAS!!!!!.
Su madre les dijo no acercaros a las obras no toquéis hierros ni clavos todo lo que hay es peligroso.
Estuvieron escarbando cogiendo maderas buscando clavos para hacer patinetes alambres para atarlos, en fin todo lo que les había prohibido su madre. Por desgracia paso lo que no le tenía que pasar.
La pobre Pequeña P se lastimo y se la tuvieron que llevar al hospital con una madera enganchada en el pie una madera que tenía un clavo muy largo por la parte de atrás y al saltar lo piso sin darse cuenta y se lo clavo.
Lograron quitarle la madera y el clavo que tenía enganchado en el pie le pusieron la inyección del tétanos y le curaron la herida.
¿Creéis que escarmentó? ¡NO! ¡NO! ¡NOOO! Escarmentó.
Si su mama le decía no te subas Pequeña P que te puedes caer Pequeña P iba de cabeza y zasss se caía.
Si le decía cuidado con las escaleras Pequeña P las bajaba de tres en tres. Consecuencias, dientes torcidos ,codos fracturados y unos cuantos chichones en la cabeza.
Aller fue un buen día no le tuvieron que poner la inyección del tétanos ni curar a la Pequeña P.
Un día muy, muy tranquilo……………………….FIN.
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