Pasaron unos años. Nicolás que así se llamaba el niño, en el colegio era muy aplicado le gustaba estudiar y sacar buenas notas, estudiaba todo lo referente al espacio y a los planetas.
Se intereso en los satélites y como su ilusión era ser astronauta se fue a Estados Unidos a prepararse.
Le costó muchas horas de estudios y preparación.
Pero al fin su sueño se hizo realidad.
Lo habían elegido entre muchos candidatos porque era el que mejor preparado estaba. ¡Por fin seria astronauta!
¡Astronauta y viajar por el espacio!
Llego el día señalado, se subió en un trasbordador que iba conectado a un cohete solo faltaba que desde el centro de control lo lanzaran hacia el universo.
Su corazón iba a cien por hora, suspiro y cerro los hojos,cuando se quiso dar cuenta el cohete ya había despegado de la tierra y cada vez se alejaba más y más.
La tierra se veía muy pequeña y en el espacio todo parecía flotar.
Se apreciaba una fuerte luz miraba a su alrededor y contemplaba a los demás planetas pero la vista se le iba hacia aquel planeta pequeñito azul y blanco llamado tierra.
Estuvo varias semanas girando alrededor de la tierra hasta conseguir los datos que necesitaba.
Fue un sueño le dio mucha pena tener que volver a la tierra.
Pero se prometió que no sería la última vez que subiría al espacio.
Se seguiría preparando para que en la próxima misión también lo eligieran a él.
Colorín Colorado la historia del niño astronauta ha terminado.